2.6.10

Son tiempos dificiles.

Pongamosle un FF a esta adolescencia de mierda, adelantémonos a los 30 para cuando todos ya estamos casamos, ya fuimos cornudos, nos recibimos y estamos hasta las pelotas con problemas de fácil solución.
  Ya estoy harta de clavos en el orto, experiencias nuevas y aprendizaje constante, ni hablar de las búsquedas sin recompensa y las frustraciones que acarrean: Me tengo las pelotas llenas de seguir siempre igualde sentir lo mismo, de llegar a disfrutar romperme la cabeza contra la pared sin importar lo mucho que me duele cada nueva cicatriz. ¿Tanto puede costar separarse de lo que me hace mal? ¿Hasta donde puedo llegar? Y si siempre pienso en límites la verdad es que me cago en mis teorías porque sigo (y los factores harán lo imposible para que así sea siempre) arrastrando toda la mierda, todo este peso que me hace volver siempre al punto de partida: frustrada, infeliz y sola, malditamente sola. Que pendeja de mierda ¿no?
  Muchas veces les echo la culpa a ustedes y tengo ganas de recluirme en alguna isla solitaria para evitar ese molesto contacto que me hace bajar tanto, después me viene a la cabeza una frase que alguien alguna vez me dedicó: los fantasmas viven únicamente en tu cabeza así que ni siquiera mudándome a la isla más chiquita del archipiélago más lejano voy a poder vivir en paz, que copado eh? Que panorama más alentador. Ahora bien, ¿Cuantos años más voy a tener que seguir bancándomela así? Porque les cuento que a veces todos estos pensamientos que tengo atragantados se alborotan y quieren salir, últimamente están bastante rebeldes y yo más desmotivada, controlarlos ya no me gusta tanto pero vomitarlos   no es una posibilidad posible. Vuelta a lo mismo, soy increíble. 
 Mi problema más grande soy yo y hasta que no me lo meta en la cabeza no puedo avanzar en nada, con nada, con nadie. El problema más problemático de ser YO es que no tengo arreglo, con el diagnóstico en mano no puedo curarme, ni siquiera sé si existe alguna maldita cura pero lo que sí sé es que esta enfermedad está matando la poca esperanza que guardaba. 
 Estoy empezando a resignar todo aquello que -creia- formaba parte de mi destino: la carrera de mi vida, encontrar al individuo capaz de quererme SIN PEROS NI RESTRICCIONES, levantarme cada mañana sabiendo que tengo todo lo que me hace falta, todo lo que siempre quise; en cambio lo más probable es que mi vida a los 30 sea la de una oficinista mediocre casada con otro oficinista mediocre, padre de mis hijos mediocres en esta ciudad tan mentirosa, que tanto me prometió y a cambio no me da nada. Pero si ese es mi verdadero y único destino, si ser una fracasada, infeliz y sola -aún con un marido- es mi final feliz, por favor que esta transición se pase rápido porque esto de asesinar mis creencias, planes e ideales no me genera ningún placer. Me duele y me molesta, muchisimo. 
 ¿Me pasas el control remoto? Esta película ya me aburrió

1 comentario:

  1. Me encanta tu buena onda :P
    Tanto te desilusiono la ciudad? Con lo que yo la necesito aproximadamente 50 semanas al año... (Estoy un tantito ebrio y muy expresivo)
    Sabés cual es el tema de la gente? Que no piensa ni un segundo que no existen los tiempos fáciles y, peor aún, que está bien que así sea. No es por crecer, es por tener algo que hacer, algo que escribir, algo que sentir, algo que mejorar. Sería muy embolante el instante perfecto, completamente carente de sentido. Seguramente me lo vas a tener que recordar el 99, 876% del tiempo de mi vida que dedico a pensar como la gente normal que se queja siempre :)
    Un beso, te quiero (mas si estás contenta xD)

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